Desde afuera de la casa pudieron ver que el delincuente había atado a Sáenz a una silla y le estaba pegando. A los minutos llegó la Policía de San Isidro. Cuando ingresaron, encontraron a la víctima ya fallecida, flotando en la pileta y con un cable HDMI alrededor del cuello.
La hipótesis es que Sáenz logró desatarse y forcejeó cuerpo a cuerpo con el ladrón, que lo estranguló con el cable que había usado para atarlo. En la casa se encontraban dos sobrinas de la pareja de 8 y 11 años, pero estaban en la planta alta y resultaron ilesas.
El delincuente quedó detenido y está a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Boulogne, a cargo de la fiscal Paula Hertrig.

