A los 43 del primer tiempo, llegó el grito que hizo estallar al Gigante. Tras un envío de pelota parada desde la derecha, el pibe Alejo Véliz le ganó de arriba a Cristian Lema y conectó un cabezado que superó al arquero Franco Herrera, que se quedó parado porque pensó que la bocha salía. Fue el 1-0 en el clásico.