La Justicia Federal condenó a una pareja de narcos que formaba parte de una importante banda local que fue desbaratada en los últimos años. Se trata de Rosana Carina González y su marido Claudio Luis “La Chancha” Cardoso, quienes se domiciliaban en la zona norte de la ciudad de Santa Fe y habían sido detenidos a fines de 2021 durante un allanamiento.
Las investigaciones contra la organización criminal se iniciaron hace años en virtud de una denuncia presentada por la Fiscalía Federal N.º 2, que refería a la existencia de una estructura delictiva destinada al comercio de estupefacientes dirigida por Lorena Guadalupe Melgarejo y Claudio Andrés “El Pulga” Casco. Ambos permanecieron dos años prófugos hasta mediados de este año, cuando cayeron presos. Hoy están procesados.
Por otra parte, la suerte de González y Cardoso -miembros destacados de esa banda- se comenzó a sellar gracias a un operativo de prevención que realizó la policía de la provincia en el cruce de calle Damianovich y avenida Blas Parera, el 11 de enero de 2021, cuando la hija de ambos fue sorprendida a bordo de un Peugeot 206 con estupefacientes en su poder.
Diamela Carina Cardoso llevaba consigo una mochila con un trozo compacto de cocaína, dos teléfonos celulares, un cuaderno con anotaciones y una balanza.
Con los elementos reunidos, en el transcurso del mismo año, se ordenaron ocho allanamientos, en los que fueron apresados los padres de Diamela. Durante el operativo, también se secuestraron estupefacientes.
Cardozo y González fueron procesados por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización agravado por la participación de tres o más personas organizadas para cometerlo, en concurso real con el delito de tenencia simple de estupefacientes. Este mes se firmó un acuerdo de procedimiento abreviado entre las partes. Ahora, el juez de Cámara Luciano Homero Lauría homologó el documento y emitió sentencia.
El magistrado consideró probado que si bien Rosana González y Claudio Cardoso no iban en el auto con Diamela, eran ellos quienes habían enviado a su hija a ocultar la droga y los demás elementos, porque alguien les avisó que la policía podía allanar la casa. Así quedó acreditado en distintos mensajes que fueron hallados en los teléfonos incautados y peritados.
A continuación, se transcriben algunos de los mensajes:
Una persona no identificada dice: “porque está atrás el narcotráfico…” (…) “me enteré porque mandaron un oficio a la Brigada…” (…) “y hoy a la mañana ya había un oficio…” (…) “mandaron un oficio a la brigada que investiguen ese hecho…” (…) “algo raro hay…” (…) “a mi no me dijeron…” (…) “dice que alguien entregó algo aho…” (…) “mira lo k dice marin…” (…) “k ay alguien k entrego algo grande en horizonte…”
A lo que Rosana González responde: “escuchá amiga, yo ahora saco…ya está todo, ya saque todo amiga. Voy a sacar los teléfonos, así que ya te paso un numero nuevo para que vos me mandes a ese, sabés? Y el tío también, porque el del gordo también lo saco…” (…) “mándame ai…” (…) mándame al número que te mande porque ya lo saco yo a este, ya, ya, ya…” (…) “y quédate tranquila amiga, que ya está todo fuera del barrio, bien lejo todo, no hay nada, nada, nada de nada…”.
Finalmente, en base al acuerdo firmado por el fiscal general Dr. Martín Ignacio Suárez Faisal y el defensor público oficial Dr. Fernando Sánchez, el juez Lauría condenó a González y Cardozo como “autores de los delitos de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización en concurso real con tenencia simple de estupefacientes a la pena de cuatro años de prisión y multa”.
Además, como ambos ya habían sido sentenciados por delitos similares y se hallaban cumpliendo sus respectivas penas, el juez resolvió unificar las condenas. A González se le revocó la libertad condicional que gozaba y se la terminó sentenciado a cinco años de prisión.
Por su parte, a Cardoso se le fijó la pena única de seis años y ocho meses de cárcel.
Diamela
Diamela Cardoso fue condenada por el mismo tribunal en febrero de este año como autora del delito de tenencia simple de estupefacientes a la pena de dos (2) años de prisión, toda vez que no se pudo acreditar su participación en la comercialización de estupefacientes encabezada por sus padres.
Casco y Melgarejo
Para la Justicia Federal, los líderes de la organización narco son Lorena Guadalupe Melgarejo y Claudio Andrés “El Pulga” Casco. Se trata de una pareja de santafesinos que quedó en el ojo de los investigadores en una causa que lideró el Fiscal Walter Rodríguez por la avioneta estrellada con droga en el departamento San Justo en 2020.
El aparato fue hallado abandonado en un campo de Naré, pequeña localidad del departamento San Justo. Evidentemente, había sufrido un accidente al aterrizar, porque su estructura estaba muy dañada.
Se calcula que adentro transportaba unos 200 kilogramos de cocaína (los peritos hallaron restos de esa droga en el interior), una carga que tendría un valor de varios millones de dólares en el mercado.
En pocas horas, la policía santafesina pudo determinar que el piloto de la aeronave había sido rescatado por personas que acudieron en un automóvil azul que lo trasladó a la ciudad de Santa Fe. Allí, abordó un remís que debía llevarlo al norte del país pero no llegó muy lejos, porque una comisión lo interceptó sobre la ruta nacional 11, en jurisdicción de Crespo.
Casco y Melgarejo lograron evadir a los detectives por varios meses hasta que finalmente fueron detenidos a mediados de este año en la ciudad de Resistencia, en la provincia de Chaco.
Con información de El Litoral
