“Estoy muy triste”. Estas fueron las primeras palabras que le dijo Ariel a este medio luego de que le hayan sustraído durante el fin de semana de su vivienda ubicado en Barrio Parque (San Justo) una importante cantidad de dinero (pesos y dólares).
Era el ahorro de toda su vida, que lo destinaba a su empresa, a sus hijos que están estudiando en Santa Fe y también a su futura jubilación.
Una foto suya durante el fin de semana pudo alertar a los delincuentes que no había nadie en su casa.
Solamente un perro ciego estaba, que adoptó como compañía en su peor momento. No había nada revuelto, un casco con un par de lentes en otro lugar que pensó que su propio perro al no ver pudo haberlo movido y no advirtió que una ventana estaba rota.
. “He leído en las redes sociales de cómo no guardé toda esa plata en el banco pero la gente no sabe cómo me manejo”, expresó Ariel. Hasta ahora nada se sabe del robo.
Con información de La Cien San Justo
