La violencia volvió a golpear con fuerza en la ciudad de Santa Fe. Pasadas las 22:30 del viernes, un hombre fue asesinado a balazos en inmediaciones de calle Espora y pasaje Santa Fe, en plena zona noroeste, donde se levanta el populoso barrio Cabal.
El hecho, que sacudió la tranquilidad nocturna, fue reportado por vecinos que alertaron al 911 tras escuchar una seguidilla de disparos cerca de las vías del tren.
Al llegar al lugar, personal policial del Comando Radioeléctrico fue anoticiado por un grupo de menores que indicaron el sitio de las detonaciones.
En una breve recorrida pedestre por la zona ferroviaria, los uniformados se toparon con una escena desgarradora: un hombre yacía tendido boca arriba, sin vida, con múltiples impactos de bala en distintas partes del cuerpo.
De inmediato se convocó al servicio de emergencias 107, cuyos médicos constataron el fallecimiento. Luego, el caso quedó en manos del fiscal de Homicidios, Dr. Andrés Marchi, quien dispuso la presencia del gabinete técnico de Criminalística y PDI para las pericias de rigor.
Diez disparos y cinco vainas
Fuentes de la investigación indicaron que el cuerpo de la víctima presentaba alrededor de diez impactos de arma de fuego, mientras que en la escena se recolectaron cinco vainas servidas calibre 9 milímetros.
Los peritos trabajaron varias horas en el lugar, levantando rastros y material balístico que podría resultar clave para reconstruir la mecánica del ataque y, sobre todo, para dar con los autores del hecho.
El fallecido fue identificado como Miguel Ángel Escalada, de 32 años, domiciliado en barrio Las Flores II. Hasta el momento se desconocen las circunstancias exactas que derivaron en su muerte, aunque no se descarta que el crimen haya sido un ajuste de cuentas o una venganza personal.
Vecinos de la zona aportaron datos que podrían ser útiles para la causa, mientras los investigadores analizan cámaras de seguridad cercanas y buscan testigos que permitan establecer cómo se dio el ataque.
Intervención judicial y policial
El fiscal Marchi ordenó el relevamiento completo de la escena, la autopsia del cuerpo en el Instituto Médico Legal y diversas medidas para identificar posibles sospechosos.
El caso quedó caratulado como “homicidio calificado por el uso de arma de fuego”.
Con este nuevo crimen (el número 41 en el departamento La Capital), la ciudad suma otro episodio de violencia extrema en un año signado por el incremento de los ataques armados en la zona norte.
Mientras tanto, los investigadores intentan descifrar qué motivó el ataque y quiénes fueron los ejecutores de una muerte que vuelve a estremecer a la capital provincial.
Con información de El Litoral
