Entre las principales modificaciones, Interior recupera el control del Registro Nacional de las Personas, que había sido transferido a Seguridad en la versión anterior del organigrama, y suma competencias en relaciones con el Poder Legislativo, identificación de personas y políticas deportivas, que ahora se integran como una subsecretaría orientada a la articulación con las provincias.
También quedaron redefinidas las funciones del Ministerio de Seguridad, que mantendrá bajo su ala la Dirección Nacional de Migraciones, los controles fronterizos, la seguridad aeroportuaria y la coordinación de políticas en materia criminal, fuerzas policiales, inteligencia y manejo del fuego.
El DNU establece que los cambios entran en vigencia desde su publicación y deberá ser remitido a la Comisión Bicameral Permanente del Congreso para su tratamiento, tal como dispone la Ley 26.122.

