El túnel subfluvial Raúl Uranga — Carlos Sylvestre Begnis cumple sus 50 años desde aquel día en que Santa Fe y Entre Ríos quedaron definitivamente vinculadas por la habilitación de esa conexión física que logró sacar del aislamiento a la Mesopotamia argentina.
El acto central será a las 10, en la cabecera paranaense del viaducto, con la presencia de autoridades, personal del ente, invitados especiales y medios de prensa nacional y de ambas provincias. Para esto se convocó a las personas que participaron en la construcción del viaducto.
Ya han sido invitados los gobernadores de Entre Ríos Gustavo Bordet y de Santa Fe Omar Perotti, y los intendentes Adán Bahl y Emilio Jatón, de Paraná y de Santa Fe respectivamente.
El túnel
El túnel Uranga — Sylvestre Begnis es un corredor subterráneo-subfluvial construido bajo el lecho del Río Paraná. Además de cumplir la función de conectar a las redes de tránsito rodado de las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, la monumental obra constituyó el primer nexo efectivo de comunicación entre la Mesopotamia argentina y el resto del país, ya que la construcción se inició en el año 1962 y el túnel se inauguró formalmente en 1969.
La construcción de este viaducto, fue responsabilidad de la compañía alemana Hochtief AG, mientras que los planos fueron obra de la empresa argentina Sailav SA.
Si bien la solución natural hubiese sido la elección de un puente, los gobiernos provinciales sólo pudieron escoger ese formato por la falta de colaboración del Estado nacional, a quien corresponde la jurisdicción sobre los espejos de agua. En 1960 firmaron un tratado interprovincial proyectando la tarea compartida, y en junio del año siguiente se dio comienzo a las obras. Fue inaugurado el 13 de diciembre de 1969, y bautizado con el nombre de Hernandarias de Saavedra, primer gobernador criollo del Río de la Plata, de la época colonial.
La estructura del túnel tiene una longitud de 2.397 metros, a los que se suman las rampas de acceso y caminos de convergencia para dar un total de unos 3.497 metros. Está construida a base de segmentos cilíndricos de 64 x 10,8 metros, acoplados y enterrados en el fondo limoso del río. En su cota más profunda, el techo del túnel se encuentra a unos 32 metros bajo la superficie del río. El flujo de aire se regula por un sistema de ventilación forzada; la iluminación se ajusta automáticamente a las condiciones exteriores.
En 2001 se estableció su actual nombre, Raúl Uranga – Carlos Sylvestre Begnis, como un homenaje a los gobernadores de Entre Ríos y Santa Fe, respectivamente, que hicieron posible la obra.
La conexión vial entre Paraná y Santa Fe por el túnel subfluvial presenta un flujo de aproximadamente 10 mil vehículos diarios. El tránsito que pasa por el viaducto es en un 70 por ciento de origen regional.
*Fuente lacapital.com.ar

