Entre el 17 de febrero y el 23 de marzo, las y los ingresantes a las carreras presenciales de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) deberán realizar el curso de articulación denominado Iniciación a los Estudios Universitarios (IEU).
Los mismos son de carácter obligatorio y están orientados a la formación general, comprensión lectora y ambientación a la vida universitaria. En tanto, los Cursos Disciplinares se dictarán entre el 22 de febrero y el 20 de marzo.
“En todos los casos la modalidad de cursado será virtual”, aseguró Marcel Blesio, directora del Área de Articulación e Ingreso de la Secretaría de Planeamiento Institucional y Académico de la UNL, para luego completar: “De este modo, garantizamos Educación pública de calidad priorizando el cuidado de la salud en el contexto de COVID-19 para toda la comunidad universidad, respetando los Protocolos de Bioseguridad como lo viene haciendo la UNL desde 2020”.
Luego, Blesio explicó: “El año 2020 ha sido un año diferente para todos: el aislamiento social, preventivo y obligatorio nos llevó a tomar una serie de medidas de excepción, sobre todo en el ámbito educativo, en relación a la modalidad de cursado del Ingreso a la UNL y a diferentes actividades académicas para atender el nuevo contexto.”
“En este marco, y en acuerdo con las unidades académicas, se diseñó este curso denominado Iniciación a los Estudios Universitarios, creado por la Resolución Nª 341 del Consejo Superior, que tiene como objetivo reunirnos, dialogar y dar los primeros pasos entre todas las personas que optaron por la UNL y aquellas que venimos siendo parte de su comunidad académica”.
En este sentido, la directora del Área de Articulación e Ingreso precisó que “hemos recuperado contenidos y experiencias que han sucedido en los últimos años en la UNL, en ejes particulares que se entraman en la nueva propuesta.”
“De esta manera se proponen aproximaciones a problemáticas comunes entre la universidad y el contexto socio-cultural, se promueven prácticas académicas de producción recuperando el carácter provisional y controversial del conocimiento, la cultura digital y sus vinculaciones con el mundo universitario; y fundamentalmente el rol de los universitarios como sujetos críticos, con sólida formación científica y de ciudadanía”.

