La morosidad en las familias subió por décimo mes consecutivo en agosto y alcanzó un 6,6% sobre el total de créditos, lo cual representó un nuevo récord en el registro de esta medición, que comenzó hace 15 años. Las elevadas tasas de interés y el poco dinamismo de los salarios reales impactaron en la capacidad de pago.
Así lo informó el Banco Central (BCRA) a través de su Informe sobre bancos. El mismo indicó que el ratio de irregularidad de los préstamos de las familias avanzó en 0,9 puntos porcentuales (p.p) respecto de julio y tocó su máximo desde que la autoridad monetaria comenzó los registros, en 2010.
De acuerdo con el reporte, la tendencia de los meses previos venía mostrando que los principales aumentos de morosidad se estaban viendo en los préstamos personales y el financiamiento con tarjetas de crédito.
En el caso de las empresas, la irregularidad fue del 1,4%, lo cual implicó una suba mensual de 0,2 p.p. En este caso se trató de la cifra más alta desde inicios de 2024. Sumando familias con empresas, el porcentaje fue del 3,7%, 0,5 p.p por encima del dato de julio.
Los salarios no acompañan la suba de tasas
Vale recordar que, durante el octavo mes del año, la tasa nominal anual (TNA) de los préstamos personales arrojó un promedio del 74%, una cifra muy por encima de la inflación esperada para los próximos 12 meses. La situación no cambió en los meses siguientes, dado que, en septiembre y lo que va de octubre, el rendimiento se ubicó mayoritariamente por encima del 80%, alcanzando un pico diario de 87%.
A su vez, en los últimos días las tasas de los instrumentos financieros de cortísimo plazo, como las cauciones y los repos, volvieron a dispararse debido a la falta de liquidez y el apetito por el dólar, en la previa de las elecciones legislativas y la incertidumbre respecto del acuerdo con EE. UU. Si bien la intervención del BCRA y el Tesoro amortiguó los retornos, no se vislumbra un escenario favorable a una reducción en el costo del endeudamiento.
Paralelamente, los salarios reales no muestran una tendencia a recuperar el deterioro sufrido en los últimos años. Si bien los últimos datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (Sipa) mostraron para julio la tercera mejora consecutiva en los ingresos de los trabajadores registrados en el sector privado, los mismos se mantuvieron debajo del último pico de febrero (que ya era bajo en términos históricos).
Con información de Rosario 3

