Francisco llamó a los fieles católicos a “vencer rivalidades, divisiones, miedos, superstición, violencia y explotación”. Además, incitó a que sean instrumentos del amor en la provincia de Sandau, durante la segunda etapa de la gira.
El Sumo Pontífice arribó este lunes a Dili, capital de Timor Oriental, tras un vuelo de unas tres horas y media desde Papúa Nueva Guinea, su escala anterior en la gira por Asia y Oceanía. La isla del sudeste asiático de mayoría católica es la tercera parada de su viaje apostólico. El próximo miércoles 11 de septiembre concluirá su travesía en Singapur.
Los fieles que se reunieron en la explanada frente a la Pro-Catedral de la Santa Cruz en Vanimo, entre ellos catequistas, religiosos, laicos y familias, fueron los destinatarios de las palabras del Papa. Francisco tomó como enmarcó su discurso en las experiencias de misión en una tierra bendecida por maravillas de la Creación, pero, sobre todo, por un pueblo de gente buena que “se manifiesta en la caridad con la que se aman”.
De acuerdo con la descripción del sitio oficial del Vaticano dicha localidad está “bendecida por una maravilla de paisajes que evocan el Edén”.
Con información de El Litoral