Último mensaje del Gobernador Miguel Lifschitz. Apertura de Sesiones Ordinarias de la Legislatura Santafesina (La número 167).
“Hoy es la última vez que ejerciendo la función de gobernador me toca presidir esta ceremonia de apertura de las sesiones ordinarias de la Legislatura de la provincia. Han sido tres años largos muy vertiginosos, días muy intensos en los que pusimos todo nuestro esfuerzo para realizar la mejor tarea posible en esta alta responsabilidad que me dieron los santafesinos”, expresó el gobernador al iniciar su discurso.
Tras agradecer a los legisladores oficialistas y opositores por contribuir a la gobernabilidad de la provincia, el gobernador envió un “efectuoso saludo a todos los trabajadores de la provincia en su día. A lo largo de nuestra gestión hemos batallado incansablemente por defender cada puesto de trabajo, por aumentar el empleo que se necesita para las nuevas generaciones”.
Condiciones adversas
En
otro pasaje de su discurso, el gobernador dijo que su gestión se
desarrolló “en un contexto nacional complejo, litigando para cobrar la
deuda que el Estado nacional todavía mantiene con la provincia”, y
describió en ese sentido la situación nacional: “Intentamos sortear las
condiciones económicas adversas que han incrementado los niveles de
pobreza y destruido puestos de trabajo y deteriorado el salario”.
Reforma constitucional
Más
adelante, Lifschitz aseguró que lo que había propuesto hace casi cuatro
años cuando asumía la primera magistratura en la provincia “se ha
cumplido”, y agregó que “si algo importante quedó pendiente fue la
reforma constitucional. Es una deuda que en mi opinión, sigue
pendiente”.
En ese sentido, dijo que “no sería
bueno, después de todo lo avanzado, que el proyecto de reforma
constitucional quede guardado en un cajón”, y aseguró que por ese motivo
convocó a la realización de una “consulta popular no vinculante,
coincidente con el próximo turno de las elecciones generales en junio,
para que el pueblo opine libremente.
Infraestructura
En
cuanto a obras públicas y planificación, el gobernador expresó que “se
incorporaron mecanismos de fuerte incidencia territorial, buscando un
accionar mucho más operativo y enfocado en resultados palpables y
tangibles”.
Cambios en el Poder Judicial
En
otro pasaje de sus palabras ante la Legislatura, el gobernador mencionó
los cambios que se impulsaron en el Poder Judicial, trabajo al que
atribuyó a los poderes Ejecutivo y el propio Judicial porque “la
sociedad exige un servicio de justicia eficiente, moderno y
transparente. Un primer paso fue agilizar el proceso de selección de
jueces, camaristas, fiscales y defensores, lo que nos ha permitido
cubrir más de 250 vacantes en 3 años, el mayor número desde 1983”,
remarcó. Y en ese sentido, enumeró: “Promovimos la reforma de todos los
códigos procesales de la provincia: el Código Procesal Laboral y el
Código Procesal Penal, aprobados por esta Legislatura, como también el
nuevo Código de Faltas denominado Código de Convivencia. Están en
tratamiento, todavía, la reforma del Código Procesal Civil y Comercial y
el Código Procesal Penal Juvenil”.
Violencia e inseguridad.
Al
referirse a los índices de violencia que se han registrado tanto en
Rosario como en Santa Fe, Lifschitz remarcó que se un tema complejo,
pero aclaró: “No creemos en la militarización de la lucha contra el
delito y el narcotráfico. No dio resultado en ninguna parte del mundo.
Sí creemos en la firmeza de los gobiernos, el profesionalismo de las
fuerzas de seguridad, la legalidad y la integralidad de las políticas de
seguridad en vinculación con políticas de empleo, educativa y social”.
“Pusimos en marcha un plan de seguridad pensado de manera integral y abarcativo de los múltiples aspectos del problema. Un primer objetivo era profundizar la reforma policial, asumiendo la responsabilidad de ejercer el gobierno y control político de la fuerza y de la política de seguridad desde una perspectiva multidisciplinaria para la prevención, represión e investigación del delito y la violencia”, dijo.