Tras la muerte de un bebé por tos convulsa (coqueluche) en Villa Gobernador Gálvez, la directora de Promoción y Prevención del ministerio de Salud provincial insistió en la importancia de la vacunación como protección colectiva, sobre todo, hacia los más vulnerables; en este caso, el chiquito de un mes y medio que falleció en la vecina localidad y cuya madre no se había aplicado la vacuna durante el embarazo. La funcionaria vinculó la falta de inoculación a los contagios. E informó que aún desatada la enfermedad, si se la detecta temprano, se puede hacer quimiprofilaxis en el entorno cercano para reducir contagios y contener su expansión. Por eso, recomendó no esperar a tener todos los síntomas para hacer la consulta.
“Si hacemos rápidamente el diagnóstico se puede comenzar el tratamiento con antibióticos y una quimioprofilaxis para el entorno de contactos”, señaló Chumpitaz, en contacto con el programa Radiópolis (El Tres).
Explicó que la tos convulsa es altamente contagiosa pero se puede prevenir. Que los adultos y adolescentes funcionan como “reservorios” de la enfermedad y que por eso es muy importante la vacunación y sus refuerzos. De acuerdo al calendario, se coloca en embarazadas en la semana 20 de gestación y luego, en el bebé a los 2, 4, 6 y 15 meses. Y más tarde en el ingreso escolar y a los 11 años.
Por ahora, Santa Fe registró 31 casos de tos convulsa, la mayoría de menores de 1 año y adolescentes, según precisó Chumpitaz que insistió en completar los esquemas de vacunación por “una cuestión individual y colectiva”.
“Ha habido una disminución en la cobertura de inmunizacinoes en todo el mundo luego de la pandemia. Antes también, pero durante la pandemia se agudizó. El descenso sigue. Necesitamos vacunar por la cuestión colectiva porque así evitamos la enfermedad. Si me vacuno, tengo 11 años, también puedo evitar que se enferme el entorno mas cercano y quizás ahí tengo un hermanito pequeño que puede tener una enfermedad grave”, graficó.
La diferencia con una alergia común
Chumpitaz explicó que la tos convulsa es una enfermedad bacteriana altamente contagiosa que tiene dos etapas. Comienza con un catarro sin fiebre y sigue como tos seca. Aunque algunos podrían confundirla con una alergia estacional, difiere en la ausencia de rinitis. Con todo, ante la duda y, sobre todo, ante la persistencia de la tos, conminó consultar al médico para, llegado el caso, iniciar el tratamiento rápido y la profilaxis de contención. El coqueluche se trasmite por las gotitas de saliva al toser, estornudar o hablar. De ahí también, recalcó, mantener las medidas de cuidado aprendidas y aprehendidas con la pandemia: lavado frecuente de manos, ventilación de ambientes y evitar concurrir a lugares públicos como la escuela o el trabajo si se tienen síntomas.
Con información de Rosario 3 – Imagen de la directora de Promoción y Prevención del Ministerio de Salud, Analía Chumpitaz

