A pocas horas de conocido el pool de empresas que participan de la licitación para la construcción del nuevo puente Santa Fe – Santo Tome, todavía resuena el eco de los discurso que a la vera del río Salado dejaron los principales funcionarios del Gobierno provincial.
Uno de ellos fue el ministro de Obras Públicas, Lisandro Enrico, que además de dar una primicia -confirmada minutos antes por su par de Economía, Pablo Olivares-, se comprometió en inspeccionar y controlar que la adjudicataria cumpla con los plazos y con el proyecto original, nacido de un equipo de profesionales de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV).
“Esta es la licitación de la obra pública de la gestión del gobernador Maximiliano Pullaro”, inició el oriundo de Venado Tuerto y aclaró: “No es una obra más del Gobierno de Santa Fe”.
“Todos saben del peregrinar de décadas, que la Nación iba a hacer un puente, que en definitiva nadie se animaba, que no se podía, que no te dejaban… La historia de promesas incumplidas que todos conocen, y lo más importante, el trastorno que sufrieron durante décadas, cientos de miles de santafesinos y satotomesinos para conectarse entre las dos ciudades”, contextualizó.
Germinar la idea
“Por eso este gobierno tomó la definición clara de emprender la obra desde la provincia”, enfatizó el ministro que puso el desafío sobre las espaldas de “los santafesinos todos”. “El pueblo de Santa Fe se pone firme, se para de manos y dice el puente lo vamos a hacer nosotros”, arengó.
Desde el anfiteatro de la ciudad de Santo Tomé, el pasado viernes por la noche, el ministro aprovechó el micrófono para hacer agradecimientos. Tuvo elogios para con el equipo del administrador general de Vialidad, el ingeniero Pablo Seghezzo; pero destacó a un ingeniero civil por sobre los demás, porque fue el que “hizo germinar la idea de que era posible hacer un puente de este tipo constructivo, un puente posible”.
“Sabemos que hay un proyecto de un megapuente que conecta calle Mendoza con Santo Tomé, pero sale entre 160 y 190 millones de dólares más o menos y el gobierno nacional no corta el pasto de la circunvalación, menos va a hacer un puente”, chicaneó al gobierno libertario.
Y volvió a su escenario para vanagloriar al ingeniero José León Garibay, ex ministro de infraestructura de Santa Fe, que fue el que dijo: “Podemos hacer un puente paralelo y con un presupuesto que la provincia pueda hacer”. Cuatro meses tardaron en tener el proyecto, “para poder llegar a tiempo al 15 de noviembre, al día de la fundación de la ciudad de Santa Fe y poder largar la licitación” del pasado viernes, recordó.
Mensaje a las empresas
Luego dirigió palabras a los empresarios de la construcción, que en gran número participaron de las ofertas. “Esta no es una obra pública más, es la obra pública que marca esta gestión, que marca el espíritu de esta nueva Santa Fe federal, que se para y hace cosas, que resuelve y ante los problemas buscamos las soluciones”, les dijo.
“De estas diez empresas una será la ganadora y el gobierno a través de una comisión evaluadora tiene que decidir, en 30 o 40 días, cuál es la mejor oferta, que no sólo tiene que ser la más económica sino la más conveniente, porque tiene que tener además de un buen precio, capacidad técnica, antecedentes, tiene que haber hecho obras similares, esa va a ser la empresa ganadora”, apuntó.
Además, sumó otro mensaje, esta vez a la que resulte adjudicataria de la obra: “Quizás para esa empresa sea una de las tantas que haya hecho en su vida empresarial, pero sepan que si deciden participar de esta licitación y hacer la obra, esta es la obra más importante de la provincia de Santa Fe. Que este equipo de Vialidad Provincial y de inspectores va a estar controlando centímetro a centímetro para que la obra se haga como corresponde”.
También dijo que van a “priorizar el tipo constructivo que Validad Provincial hizo, más allá de las diferentes alternativa” y reiteró que “nuestros inspectores estarán diariamente para que se cumplan los plazos”.
Certificado de obra
Por último, antes de despedirse, confirmó una primicia. “Esto es un anuncio -dijo-, me lo acaba de anunciar el ministro de Economía Pablo Olivares”.
Enrico explicó que “la Ley de Obra Pública establece que cuando una empresa empieza a hacer una obra hace un avance, presenta el certificado y a los 60 días cobra su certificado de obra”. Sin embargo por “el carácter extraordinario” del proyecto y “por los sentimientos que tenemos puestos todos los santafesinos” la empresa seleccionada “va a tener disponible y líquidos los fondos a los 30 días de que presenten los certificados”.
“Nosotros como gobierno vamos a cumplir con pagar regularmente y de esta forma esta obra va a tener los fondos desde que arranque hasta que termine, pero las empresas que tomen esta obra tienen que saber que tienen un deber excepcional y está por encima de todas las otras, no es una obra más, es la obra de la provincia de Santa Fe”, volvió a decir y prometió “gran rigurosidad para que cumplan con tiempo y forma”.
Con información de El Litoral
